Sufrí un intento de asesinato, por parte de uno de los líderes de la Resistencia Juvenil Cochala, Roger Revuelta y sus hermanos, quien en la madrugada me propinó 3 puñaladas […] argumentando que están en contra del trabajo periodístico que desarrollo donde denuncié los excesos de ese grupo.
Adair Pinto, en su comunicado de denuncia a la prensa.
CBBA, Bolivia — En la madrugada de este primero de febrero, mientras se encontraba en un karaoke por la zona norte de Cochabamba, el periodista de la radio Potencia Dinámica, Adair Pinto, fue amenazado y apuñalado por un grupo de hombres que se adjudicaron ser parte de la tristemente célebre y mal llamada Resistencia Juvenil Cochala (RJC).
Ingresó este grupo que argumentaba ser de la RJC y empezaron a insultarme por la labor periodística que despeño, […] en ese momento este supuesto miembro de la RJC me muestra de su celular una foto de mi hermana en la que argumentaba que la iba a violar y yo me iba a morir ese día […] Cumplieron su amenaza al salir del local donde me encontraba abordando el taxi al lado del chofer viene el señor que me amenazó de muerte, y de violar a mi hermana, me asesta un puñete, para que por detrás el ciudadano que ha sido identificado plenamente como Roger Revuelta me asesta tres puñaladas en lugares vitales. Si no hubiera reaccionado me hubiera llegado una al corazón, la otra al estómago, la otra cerca a la vena aorta en el muslo derecho.
Testimonio del periodista Adair Pinto al salir del juzgado.
Tras una audiencia que duró más de 3 horas, Jorge Revuelta con el rostro tapado, bajo el cargo de homicidio en grado tentativo, fue llevado al penal de San Sebastián a cumplir su detención preventiva por 4 meses mientras dure la investigación. El imputado contaba además con dos antecedentes penales, uno por violencia familiar y otro también por lesiones.
En una siguiente declaración, el agredido, denunció que habría identificado a Harold Revuelta, hermano de Roger, ambos hijos del expresidente del Comité Cívico y senador suplente por PODEMOS Roger Revuelta, y primos de Mario Bascopé Revuelta, (una de las caras más visibles de la RJC y quien semanas atrás habría sufrido agresiones físicas), como el sujeto que lo habría amenazado en el boliche y dado a la fuga.
Los miembros visibles de la RJC, no tardaron en pronunciarse al verse involucrados en el caso. Lo notable es que lo hicieron contradiciéndose constantemente; primero, Milena Soto, líder y cara visible del RJC, indicó que el imputado no perteneció nunca a dicha organización, para que después Yasi Molina, otro de los líderes de la RJC, desmintiera la primera versión de Soto, argumentado que “no podía desconocer al imputado” y que si bien si pertenecía a la RJC lo era como miembro pasivo y que los motores de su acción eran “personales” y hasta “sentimentales”, por el hecho de que además de periodista la víctima era parte de los guerreros digitales del MAS.
Lo que pareciera ser, sin embargo, es que los Revuelta, además de pertenecer a las “buenas familias Cochalas” que aún perviven enmohecidas en las élites citadinas, y de la cumunta derechista revivificada, serían también parte importante de la Resistencia Juvenil.
Por eso no deja de llamarnos la atención, si es que la denuncia de Pinto fuese cierta, que este hecho se haya consumado respondiendo a estos lazos consanguíneos. Nos llama la atención, también, que los puñales hayan sido direccionados y asestados en puntos vitales y estratégicos del cuerpo humano que un ciudadano común no sabría de por sí.
No deja de llamarnos la atención tampoco, los antecedentes penales de violencia con los que carga Roger R.V. (como lo nombran los medios de paga), dentro los cuales “la violencia familiar” y la amenaza de violación, se vincularían al mensaje de una virilidad machista que tan laboriosamente expanden y expresan en sus códigos su organización.
Aun no logramos entender los vehículos “sentimentales” que llevaron a estos “muchachos” a agredir a Pinto. Pero podemos leer en este crimen recrudecido, un claro mensaje de amedrentamiento para la prensa, para los masistas y para todx aquel que se anime a denunciar sus mecanismos excesivos de violencia (Lxs testigxs del acontecimiento se encuentran, según denuncia el agredido, hostigados sistemáticamente). Si bien somos críticxs a la forma en que se estructuró el aparato de comunicación en el anterior gobierno, repudiamos el grado de violencia que están ejerciendo miembros de la RJC.
¡Los hechos aislados no existen! ¡Los militares sobrevolando todos los días estos cielos y los motoqueros hostigando en las calles sí!