CBBA, Bolivia — Ante los delirios de un gobierno impuesto que aspira perpetuarse en el poder el mayor tiempo posible, ejecutando políticas de gobernabilidad que no le corresponde, las elecciones del juego democrático parece ser la única alternativa que nos queda dentro la política oficial y estadocéntrica. Para ello, el paso que sigue, según corresponde en esta nueva coyuntura, es la elección de un nuevo Tribunal Supremo Electoral, con la designación de vocales departamentales y nacionales, para que finalmente estos puedan garantizar el proceso electorero. Este escenario ha vuelto a despertar movilización y enfrentamiento en las calles.
Para el caso de Cochabamba, este 17 de diciembre, la Asamblea Departamental Cochabamba (ADC) que se disponía elegir sus vocales, fue invadida en sesión, bajo la venia de Lizeth Beramendi, por “señoras y señores” que bajo la consigna de impedir que ningún representante del MAS sea elegido, lograron que esta instancia no cumpla su misión.
A razón de ello, para este miércoles 18, grupos organizados en la “Coordinadora en Defensa de los Movimientos Sociales”, levanto una vigilia en las puertas del ADC, para garantizar que se sesione y elija a los mentados vocales.
El día de hoy se quería asegurar que la asamblea departamental pueda sesionar, dado que ayer hubo mucha presión para que todos los vocales que son militantes del MAS no puedan ejercer dicho cargo, pero no todos tenían procesos penales como decían. Por eso se vino hacer una vigilia de manera pacífica, solo para asegurar que puedan sesionar y haya vocales para las próximas elecciones necesarias. De pronto empezaron a llegar motoqueroas uno a uno y de pronto nos superaron en número hasta el punto que la política tuvo que salir a cercar.
Miembro de la coordinadora
Desde la pasada movilización ciudadana que termino en la renuncia del ex presidente Evo Morales, grupos irregulares que se formaron al calor del paro cívico se mantienen activos y parecería que se desbordaron de algunas dirigencias cívicas. La tarde de ayer, el grupo autodenominado Resistencia Juvenil Cochala (RJC) acudió, al llamado para agredir a personas particulares y a integrantes de esta vigilia.
La vigilia se habría instalado cerca a las 13 horas, para entonces había 3 motos, una hora después ya eran 30, para las 15 horas eran más de 50. Este grupo rodeo la vigilia y se dedicaron a lanzarles huevos y agua “báñense hediondos”, y a agredir psicológicamente con insultos de amplia envergadura, pero sobre todo con amenazas de violación a todos y cada uno de los integrantes, las agresiones físicas también se perpetuaban furtivamente ante los ojos policiales que hacían una suerte de cerco entre ambos bandos.
“Ese culito es mío”, “te vamos a violar”, “ya está pagado el motel”, “te vamos meter un palo”, “sabemos donde vives”, “te vamos a matar”, fueron algunas de las amenazas que se soltaban con ligereza, “con cariño” decían entre risas.
Como el grupo de la vigilia era mucho menor se decidió hacer política del silencio y no responder a las provocaciones, ese silencio al parecer ha provocado demasiado a los motoqueros y sus compañeras, porque durante horas han empezado a gritar durante horas violencia, racismo homofobia, acoso, de quienes sabían nombres, gritaban los nombres y amenazaban de violación, a mí me han amenazado igual de violación. Han llamado a la interpol pensando que todos aquí eran extranjeros, una vez que ha llegado la interpol a revisar nuestros carnets han constatado lo contrario.
Miembro de la coordinadora
Este proceso de hostigamiento, cambio de dinámica, cuando la asamblea dejo de sesionar. El grupo de la vigilia fue resguardada por la policía a la plaza principal, seguido y rodeado por estas motos que tiraban huevos, petardos y golpes como podían. A consecuencia de ello resultaron dos herdixs, una por impacto de petardo y otro por impacto de piedra.
Sonia Quispe, mujer agredida por la RJC gritaba ante la policía: “yo iba a la feria de verduras que está más al norte. los motoqueros me golpearon y arrastraron de mi cabello y me decían masita de mierda te vamos a violar”.
Carolina, integrante de la Coordinadora, denuncia que la policía omitió las agresiones y que no hizo nada para detener a personas que portaban armamento y explosivos. Agrega también, que cuando intentaban escapar de las agresiones de este grupo paramilitar, estos las amenazaban con asesinar a los hombres y violar grupalmente a las mujeres.
Denuncia 1:
Denuncia 2:
Las agresiones de la RJC llego a varios periodistas y comunicadores. Los Tiempos y Opinion denunciaron estos hechos, hasta el punto de denunciar presencia de armas de fuego. En todo esto a tiempos de agredir, a unx de nosotrxs en nuestra practica de covertura, intentaron quitarnos el equipo de trabajo.
Tras una hora en la plaza el grupo de la vigilia, de la RJC y la fuerte presencia policial se fueron dispersando. La política democrática y la practica represiva sigue engendrando cuerpos expuestos.
A la par salen Beramendi y Zurita a dar la cara por los grupos movilizados, a decir esta boca es mia aun que el cuerpo lo hayan puesto otros, como siempre. No es acaso una continuacion del viejo cuento que no termina?
Mientras tanto, en las calles la RJC se pretenden dueños, amos y señores. Adulados, laureados, aplaudidos, premiados, por este nuevo orden represivo, no son más ni menos que la encarnación del patriarcado colonial en una de sus versiones más terroríficas. Ahora además de pegar y hostigar, pueden amenazar de violación con total impunidad… vamos a esperar que lo concreten?.