El 22 de septiembre de 2020, el régimen de Añez emite el decreto 4348, que permite la identificación de zonas de producción de maíz nativo y zonas de producción de maíz transgénico, estableciendo las formas y tiempos en que se produciría maíz con semilla modificada, y el maíz nativo. La normativa, continuando con la política estatal de estos últimos años, vuelve a atentar contra las comunidades que viven de la producción de maíz nativo, la soberanía alimentaria y la gran riqueza y patrimonio genético; más aún cuando, de acuerdo a estudios, Bolivia tiene por lo menos 77 variedades de maíz nativo.
A pesar del rechazo de por lo menos 14 mil personas, y trescientas organizaciones y colectivxs contra los decretos 4232 y 4238 del 7 de mayo de 2020, los cuales permitían la evaluación de eventos transgénicos de soya, trigo, maíz, caña y algodón, el régimen de Añez ha aprobado el decreto 4348 que establece no solo la identificación de las zonas de producción de maíz transgénico y nativo, sino que permite la planificación de los tiempos en que podrían sembrarse para supuestamente no contaminar la semilla nativa. Así el gobierno establece la posibilidad de “coexistencia” de ambos tipos de semillas:
ARTÍCULO 3.- (CO – EXISTENCIA). Con el fin de evitar la generación de semilla como resultado de la polinización cruzada entre cultivos de maíz convencional o generados por cualquier tecnología, se deberán contemplar fechas diferenciadas de siembra y distancias entre campos de uno y otro cultivo, conforme a las normas técnicas y agronómicas aprobadas por el INIAF
Decreto Supremo 4348 by Chaski Klandestinx on Scribd
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Ante esta nueva normativa, la Plataforma Agroecológica Trópico, Sub-Trópico y Chaco, en un pronunciamiento, rechaza la idea de “coexistencia”, puesto que por experiencias en otros países, se ha establecido que las semillas nativas son contaminadas tarde o temprano por las transgénicas, siendo imposible la “regionalización” del uso de eventos transgénicos:
En franco desprecio al sentido común y a todo el cúmulo de investigación científica que existe en el planeta, ahora el gobierno de transición, que se decía diferente al gobierno del MAS, ha emitido un nuevo Decreto Supremo, ésta vez desconociendo que Bolivia es centro de origen del maíz, que la CPE y las leyes prohíben cualquier incursión de semillas genéticamente modificadas (transgénicos), y como pretendiendo tapar el sol con un dedo, con el D.S. 4348 del 22 de septiembre de 2020, el gobierno de la Señora Añez, una vez más se pone al servicio del agronegocio y pretende entre otras cosas, “regionalizar” el uso de los recursos genéticos.
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Acciones de rechazo a los decretos que benefician al agronegocio
El D.S. 4348 es, por tanto, otra afrenta a la vida, en beneficio del agronegocio y del círculo político que existe alrededor del mismo, el cual se ha pronunciado públicamente contra la Acción Popular presentada por pueblos indígenas y organizaciones civiles y que tendrá su tercera audiencia este 25 de septiembre de 2020, luego de dos fallidas sesiones debido a la ausencia de autoridades de estado.
Por su parte, la Sociedad de Arqueología de La Paz, este 23 de septiembre, ha enviado una carta al Comité de Culturas, Interculturalidad y Patrimonio Cultural, Comisión de Naciones y Pueblos Indígena Originario Campesinos e Interculturalidad, de la Cámara de Diputados, pidiendo una declaratoria para el Maíz Nativo, “en todas sus razas y variedades, como Patrimonio Genético Cultural Boliviano y Legado Ancestral de sus Pueblos”, y así pueda ser protegido. La misma Carta había sido enviada a la ex ministra de Culturas, Wilma Alanoca, en 2018, sin haber obtenido ninguna respuesta.
Diversos colectivos, han realizado hoy, 24 de septiembre, una Toma de Plazas en varias ciudades del país para rechazar no solo la abrogación de todo el paquete incendiario que permite los incendios en áreas protegidas y territorios indígenas, sino contra la posible aprobación de transgénicos.
Mientras en Perú se amplía la moratoria contra el uso de eventos transgénicos, en Bolivia se profundiza la arremetida del agronegocio, no solo porque tiene representantes directos en el régimen de Añez, (Branko Marinkovic y Oscar Ortiz), sino porque está en directa vinculación con el crecimiento de la frontera agrícola y los mega incendios sobre todo en los departamentos de Santa Cruz y Beni, La publicitada abrogación por parte de Añez este septiembre, del decreto incendiario 3973, que había sido aprobado por Evo Morales en julio de 2019, ha sido una pantalla propagandística, porque al mismo tiempo se ha emitido el Decreto 4334 se permite que en Santa Cruz y Beni sigan los desmontes permitidos por el Plan de Uso de Suelos (PLUS), existentes en cada departamento.
El dolor de los millones de animales calcinados, cuya expresión más elocuente son las muertes crueles y violentas de la Osa Bandera Valentina y el Tucán bautizado como Tuki-Tuki, así como la desesperación de los pueblos indígenas afectados por los mega incendios, no significan nada para la alianza del agronegocio y poder estatal.
El agroextractivismo avanza.
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Declaratoria del Maíz nativo como Patrimonio by Chaski Klandestinx on Scribd