“Los derechos humanos no pueden ser trastocados, la vida no tiene precio, la dignidad humana no puede ser en estos momentos acallada”, sostuvo el Defensor del Pueblo de Cochabamba, Nelson Cox, en declaraciones ante la prensa nacional el día de hoy, 17 de noviembre, en horas de la mañana.
Pareciera mentira tener que recordar a quienes hoy están en el poder, a quienes forman parte de las fuerzas represivas del estado, a quienes ya dejaron de bloquear sus esquinas porque se sienten que su bando ya ganó, y en general a todas las personas que no condenan (¡y más bien justifican!) la masacre a manifestantes del trópico de Cochabamba ocurrida el día 15 de noviembre que, efectivamente, LA VIDA IMPORTA MÁS que toda ideología o posición política.
Tiene que esclarecerse para vincular la responsabilidad directa, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha condenado la represión, en la que no puede participar personal militar, ha condenado el uso desproporcional [de la fuerza] que ha existido.
– Nelson Cox
Por declaraciones del Defensor de Pueblo de Cochabamba sabemos que el resultado de la represión policial y militar a lxs cocalerxs en este momento es de:
- 192 arrestados, 9 de los cuales están en situación de la sindicación de la comisión de un ilícito.
- 115 heridos internados en los hospitales Salomón Klein, México, Viedma y en Sacaba; de los cuales 4 todavía están en riesgo de perder la vida; y 5 han sido intervenidos quirúrgicamente.
- Han fallecido 4 personas en el hospital Viedma y otras 5 en la ciudad de Sacaba, sumando 9 hasta el momento. Se practicarán las autopsias a los fallecidos el día de hoy, y con los certificados médicos forenses se podrá demostrar que todos han sido muertos por impactos de bala en la cabeza y en el tórax.
Personal militar presto a reprimir a una marcha de la Zona Sur en Cochabamba el día 17 de Noviembre
Este video, días después de la masacre y en un lugar diferente, muestra la actitud con la que las fuerzas armadas se aprestan a recibir a una marcha ciudadana. No es el único material gráfico en que puede apreciarse al ejército dispuesto a disparar armas de fuego.
Las heridas más profundas que dejan momentos de convulsión social en un pueblo están causadas por la impunidad. Latinoamérica atravesó los momentos más oscuros de su historia en los tiempos en que, al cometerse los más aberrantes crímenes de lesa humanidad, nadie tenía que rendir cuentas por ellos. El Decreto Supremo No. 4078 que la Sra. Janine Añez aprobó el día 14 de noviembre, por el cual exime de responsabilidad penal al personal de las FF.AA. que participe en los operativos para restablecer el orden en el país, es una afrenta a la vida de las personas hoy movilizadas, y un insulto a las familias que lloran la pérdida de un ser querido.
Pero no son las familias de policías y militares las que hoy día están de duelo:
Visitando los hospitales no hemos encontrado un solo herido policía ni militar. No puede hablarse de enfrentamiento cuando ha existido total acto lesivo contra la vida de población civil que estaba movilizándose.
– Nelson Cox
No es lugar este para argumentaciones forenses, pero sorprende encontrar muertos solo de una parte frente al discurso oficialista preponderante en los medios de comunicación masivos de que esta masacre ocurre “por fuego cruzado“, en un momento en que interesa pretender que el país está pacificado.
Al igual que hubo consternación por la muerte de un comandante de la policía en días pasados (producto de un accidente de tránsito), y por las muertes ocurridas en las zonas de Ovejuyo y Chaskipampa en la ciudad de La Paz; hoy estamos de luto por las consecuencias de la represión por parte del estado a lxs compañerxs del Trópico de Cochabamba. Porque digan lo que digan quienes se sostienen en la polarización en este conflicto, o lo que dejen de decir los medios de paga: la vida de todas las personas vale lo mismo.
Declaraciones del Defensor del Pueblo de Cochabamba
Fuente: Los Tiempos