La Marcha de Naciones Indígena Originarias hizo su entrada a la ciudad de La Paz, luego de 41 días de marcha esforzada, que se sostuvo con los aportes de los ayllus participantes y donaciones de personas solidarias.
Justo cuando el ministro Romero terminaba su conferencia de prensa donde desprestigió la Marcha aduciendo que ésta era pagada, la columna de marchistas comenzó a descender desde la Ceja de El Alto hasta la sede de gobierno.
Al llegar al céntrico Prado en La Paz, la marcha intentó pasar por cercanías de Plaza Murillo, sin embargo un gran contingente policial se apostó para impedir el paso de lxs marchistas. Los ayllus decidieron realizar la vigilia en puertas del “Ministerio de Justicia”. Mostrando el desprecio de autoridades y la intención de éstas de ignorar y aplastar la movilización, las comisiones de lxs marchistas esperaron toda la tarde en lluvia y sin comida a una reunión para negociaciones, la cual no llegó.
Una comisión de 11 personas, entre ellas autoridades indigenas de la tercera edad, a las tres de la tarde se declaró en vigilia permanente dentro de instalaciones del Viceministerio de Autonomías. Casi a media noche, la comisión indígena originaria estaba durmiendo en sillas, gradas y piso frío de cemento dentro del viceministerio; porque la policía no dejó ingresar alimentos o abrigo, tampoco les dejó usar los baños.
Así, la gran Nación Qhara Qhara, de guerrerxs centenarios, junto a la representante de la Nación Uchupiamonas, esperarán a que la burocracia empiece su horario de trabajo y que el gobierno establezca las mesas de negociación donde lxs marchistas exigen la restitución territorial, el cumplimiento de la Constitución Política del Estado