El viernes 2 de marzo se realizó en la ciudad de La Paz, una Conferencia de Prensa, brindada por la presidenta del Colegio de Biólogos de La Paz, Ángela Nuñez; el dirigente de la Mancomunidad de Comunidades Indígenas del Río Beni y el Río Quiquibey; Alex Villca; así como de activistas y un abogado; que denunció el exterminio del jaguar así como explicó varias causas de dicha matanza en los últimos años.
Una investigación periodística a fines del año pasado, señaló la existencia de una red mafiosa de tráfico de colmillos de jaguar, así como de otras partes de su cuerpo. Como señalan investigadores esta era solo la punta del iceberg, porque detrás de la demanda en China de los colmillos del jaguar y el negociado millonario que ciudadanos chinos en Bolivia realizan por su tráfico, se encuentran cómplices de nacionalidad boliviana, y, más allá, causas estructurales que han dado lugar ya a un proceso de exterminio del jaguar.
La bióloga Angela Nuñez, señaló que, luego de la cacería indiscriminada del jaguar en los años 60, que significó el tráfico de miles de pieles desde Latinoamérica hacia otros países, ésta se incrementó de nuevo desde el 2014 aproximadamente:
A partir del año 2014 se ha podido detectar nuevamente esta amenaza y se han identificado muchísimos casos de ahí en a delante hasta este último caso de los 185 colmillos decomisados en Santa Cruz, (…)esta amenaza actualmente se suma a las otras amenazas por las cuales las poblaciones de jaguar se ven reducidas en nuestro país, tales como la destrucción de su hábitat, por el avance de la frontera agrícola y también el hecho de que tengan conflicto con algunos por ejemplo con el ganado vacuno
Alex Villca del pueblo indígena Uchupiamonas en el norte amazónico, señaló que como pueblos indígenas ven un problema creciente, donde en las radios de zonas como Reyes, Rurrenabaque o San Borja, se colocan anuncios para la compra de los colmillos. Los últimos tres o cuatro años, afirma Villca, se dio un notable descenso de avistamiento de jaguares:
La presencia de empresas de los ciudadanos chinos, de las empresas chinas, obviamente en alianza con los ciudadanos bolivianos, ha incrementado notablemente. Puedo decir que hace 3 o 4 años en el Madidi, en las rutas que hacemos en recorridos ecoturísticos, la observación del jaguar era bastante alta hace tres, cuatro años atrás, en los últimos años, poder observar un jaguar se ha disminuido notablemente.
ESCUCHAR PARTICIPACIÓN DE LA BIÓLOGA ÁNGELA NUÑEZ EN LA CONFERENCIA DE PRENSA:
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Las denuncias realizadas por otros comunarios en la zona del Madidi, hace dos años, señalaban también del escape de los jaguares a zonas muy alejadas, huyendo de, lo que coligieron, una cacería masiva. El incremento de la caza del jaguar, fue incluso visto y advertido a autoridades desde 2011-2012, siendo el 2014 un año en el que se incrementaron las denuncias sobre tráfico de sus colmillos. Si bien había amenazas anteriores por la presencia de madereros, y otras empresas en el Madidi, el 2016 habitantes de las comunidades en el Madidi, habían hecho notar la relación del incremento de la cacería a la llegada de la empresa china CAMC contratada para la ejecución del Complejo Azucarero de San Buenaventura.
Es claro que existen otras causas estructurales que son parte de la crisis por tráfico de colmillos, por ejemplo se destina un presupuesto anual de 200.000 bolivianos donados por Dinamarca para la lucha contra el tráfico de la fauna silvestre, cifra pequeña frente a la gran inversión de 6 mil millones de dólares prevista por el gobierno para un proyecto destructivo del ecosistema amazónico como es la Hidroeléctrica Chepete – El Bala. Villca señaló también la insuficiencia de equipamiento de los guardaparques, así como la apertura de la amazonía a millonarias inversiones privadas, destinadas no solo a la construcción de mega infraestructura, sino a proyectos extractivistas:
Con la lógica de “desarrollo” entre comillas, de llevarnos carreteras, de llevarnos puentes, de llevarnos fábricas, de permitir a las empresas mineras, a las empresas petroleras acceso a nuestros territorios, acceso a nuestras áreas protegidas, es el resultado que estamos viviendo de cifras cuantiosas de tráfico de vida silvestre…
Es ya conocido que no hay un seguimiento jurídico y apoyo legal efectivo, como debería realizarse a estos casos denunciados, ni a lo que está pasando en diversas zonas de la amazonía del país y áreas protegidas como Tariquía. El Ministerio de Medio Ambiente, el mismo 2 de marzo pasado, afirmó que de 15 procesos solo dos tuvieron sentencia por el tráfico del jaguar con una pena de tres años de prisión, sentencia que, como señala Núñez, puede tener medidas sustitutivas.
Tanto Núñez como Villca, coinciden en señalar que por lo que se ha ido viendo estos años, hablar de 200 jaguares asesinados para el tráfico de sus colmillos y órganos no refleja la brutal realidad de una cifra que podría ser mucho más elevada:
Alex Villca: pero esa cifra de 200 jaguares que se hubieran aniquilado en los últimos años desde nuestra vivencia como pueblos indígenas, esa cifra queda muy pequeña.
Ángela Núñez: 200 jaguares es una aproximación, es un número aproximado que se tiene, que no refleja mucho la realidad porque efectivamente no se pueden detectar todas las acciones o todos los animales que están siendo cazados a nivel terrestre y esto responde mas bien únicamente a los que han podido ser detectados, entonces estos número bien podrían duplicarse, triplicarse o incluso más.
Habiendo contabilizado estudios recientes una población de 7 mil a ocho mil jaguares en el país, la matanza de cientos de ellos puede verse como un equivalente a la figura de genocidio. El jaguar no solo es una especie muy importante para el equilibrio del ecosistema, sino que es una especie que no tiene altas tasas de reproducción, necesitando, afirma Ángela Núñez, amplios espacios para reproducirse y vivir, los cuales son cada vez más reducidos y agredidos por la expansión de la frontera agrícola o la llegada de los mencionados proyectos de expoliación de materias primas y mega infraestructuras, que le podrían llevar a su desaparición.
Ante el nivel de las amenazas para el guardián de la amazonía y este inminente peligro de extinción, el cuidado de la vida del jaguar es una convocatoria para todxs, el no permitir que la muerte tan cruel de cientos de jaguares siga siendo la base de un negociado millonario sostenido por redes de tráfico nacional e internacional, y agudizado por proyectos extractivistas.
Conferencia de prensa frentw al exterminio de jaguares
Gepostet von Chaski Clandestina-o am Freitag, 2. März 2018
Participación en la conferencia de prensa de Alex Villca, representante de la Mancomunidad de Comunidades Indígenas del Río Beni y Río Quiquibey